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El Skoda Superb, se ha convertido en el buque insignia de la marca apadrinada por Volkswagen, esta versión, Laurin and Klement, es un homenaje a los fundadores de la marca que en el año 1905 empezaron con la fabricación de sus primeros automóviles.

Dotado con un nivel de acabados y equipamiento, digno de las mejores berlinas del mercado, el Skoda Superb Laurin & Klement, es un elegante salón rodante de talla XXL, pues sus 4,85 metros no pasan desapercibidos y lo convierten en uno de los coches con más habitabilidad interior dentro de su categoría.

Los diferentes elementos exteriores que equipa el Škoda Superb Laurin & Klement, le confieren un toque de elegancia, como la parrilla delantera o los diferentes cromados que podemos encontrar dispuestos en la carrocería. Algo muy llamativo y quizás lo más representativo de este coche, son las twin-windows que encontramos en las puertas traseras, que le dan ese toque final de berlina de lujo.

Su forma carrocería de forma rectangular, le confieren un aire aburguesado, que junto a las preciosas llantas Sirus de 18” que equipada nuestra unidad de prueba y las dobles salidas de escape denotan que bajo tanta elegancia y el capó delantero, encontramos un corazón rebelde, el conocido motor 2.0 TSI de 200 cv que equipa el mismísimo Volkswagen Golf y que es capaz de mover con soltura a este Titánic de la carretera.

Con solo abrir la puerta, ya te das cuenta de que el Superb es tan imponente por dentro como por fuera. Los asientos de piel, de gran tamaño, llevan impresas las iniciales L&K y son ideales para albergar a cualquier adulto sea cual sea su talla, y lo mejor de todo, aunque el asiento del conductor o el del pasajero lo lleves hasta atrás del todo, las piernas de los pasajeros traseros, jamás llegarán a rozar los respaldos delanteros, pues la habitabilidad de este coche es sorprendente, y nada tiene que envidiar a muchos coches de su segmento, cuya diferencia de precio es tan notable y desmesurada como las medidas del Laurin & Klement.

El puesto de conducción es muy agradable, ya que nos invita a pasar largas horas tras el volante, escuchando música del generoso equipo de sonido Bolero que cuenta con 10 altavoces y que convierten a este coche en una verdadera sala de audición en la que conducir se convierte en uno de los placeres de la vida.

El salpicadero, dispone de dos grandes relojes separados por una multifuncional pantalla digital en la que encontramos información del coche. En el centro del mismo, una gran pantalla de 7”, da cabida a los diferentes elementos multimedia, sonido y a un navegador fácil e intuitivo de utilizar cuya precisión es admirable. En la parte más baja, encontramos el climatizador y los mandos de calefacción de los asientos delanteros.

Los acabados en madera, nos recuerdan en todo momento que nos encotramos ante una versión muy especial y elegante del Superb.

En el túnel central encontramos la palanca de cambios del DSG de inspiración aeronáutica, pues parece más bien el control de aceleración de un jet privado, cuyo tacto y manejo es muy sencillo pero eficaz.

Si de verdad, queremos saber que se siente dentro del Skoda Superb Laurin & Klement, es cuando pasamos a la parte posterior y nos sentamos en cualquiera de los dos sendos y confortables sillones, que por momentos, nos hacen sentir como si fuéramos el presidente de una gran compañía al que su chófer lleva al trabajo y en el que de disponer de un equipamiento Premium, podríamos convertirlo además, en una útil oficina rodante.

No menos importante es el maletero, que podría dar cabida a todo a lo que una gran dama quisiera comprar disfrutando de un paseo por cualquier ciudad en la que disfrutar de una tranquila jornada de shopping, pues 565 litros dan para multitud de esas grandes bolsas que las mejores tiendas ofrecen a sus más distinguidas clientas.

La verdad es que escoger un escenario para la prueba del Superb, no era tarea fácil, pero enseguida, y tras conducir tan solo unos pocos kilómetros, nos dimos cuenta de cual serían los dos perfectos y tras poner rumbo a ellos, disfrutamos de una preciosa mañana de conducción por la ciudad de Barcelona, entre el tráfico, para ver la capacidad de maniobrabilidad con un coche de tal envergadura, y la verdad, podemos asegurar, que es un coche de diario y que sus medidas no son un inconveniente sino todo lo contrario, son un mar de ventajas que puedes disfrutar pues la facilidad de conducción que ofrece todo el conjunto es admirable.

Su motor, rinde una potencia de 200cv y como ya hemos mencionado anteriormente, es un 2.0 TSI de cuatro cilindros turbo alimentado, cuya mejor cualidad es la capacidad que tiene de respuesta desde cualquier régimen de giro, así como la elasticidad que nos ofrece si le pedimos que así lo haga.

Sus prestaciones, son dignas de admirar, pues la marca nos habla de una aceleración de 0 a 100 km/k en 7,8 segundos, cifra que podemos encontrar en otros coches de talante más deportivo que el Superb.

Si hay algo que mencionar y con nota alta, es la caja de cambios de doble embrague DSG, cuyo funcionamiento es simplemente calificable de “PERFECTO”. En ciudad los cambios son precisos y si la utilizamo s en modo secuencial, que tan solo podremos hacerlo mediante la palanca de cambios pues no hay levas en el volante, disfrutaremos como en todos los modelos que llevan esta caja, de unos cambios directos y unas reducciones de infarto, si queremos sacar a pasear los 200cv que llevamos bajo el capó.

Condujimos por lo que antaño fue el mítico circuito de Montjuïc, y todo que la velocidad allí es limitada, todavía queda alguna curva, en la que a una velocidad muy ajustada, puedes probar la capacidad dinámica del coche, y la verdad es que el Skoda Superb Laurin & Klement, en este trazado se movió con soltura, gracias al sistema tarado de suspensiones que le otorgan una muy buena sensación de aplomo.

La dirección es directa, suave y precisa y te da la seguridad de saber que puedes controlar el tren delantero con gran facilidad. En el apartado de frenos encontramos 4 discos, ventilados los delanteros, que son suficientes, y por cierto, bastante inagotables para detener al Skoda Superb Laurin & Klement.

Nuestro segundo escenario, fue un viaje por autopista, el ideal para el Superb. Aquí es donde te das cuenta del talante burgués, de la capacidad que tiene este coche de hacerte olvidar que puedes llevar muchos kilómetros tras el volante, pues el nivel de confort que ofrece en marcha es admirable. Y si alguien puede opinar sobre esto, seguro serán los pasajeros que llevemos en la parte trasera, que son los encargados de disfrutar de la generosidad de espacio con la que ha sido dotado el Skoda Superb Laurin & Klement, una berlina de lujo que al alcance de todos.

Escrito por Miguel Angel Solá
Agradecimientos
Volkswagen-Audi España, S.A.
www.comunicacion.skoda.es