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Como bien dice y anuncia el título de nuestra prueba, y aunque a muchos les cueste creer este dato, el Škoda Kodiaq RS ostenta un récord en el exigente trazado de Nürburgring con un tiempo de 9 minutos y 29 segundos es el SUV de 7 plazas más rápido en dar una vuelta completa a los 20,832 kilómetros a manos de la piloto de carreras Sabine Schmitz.

Quizás con este récord, Škoda ha querido de alguna manera poner un broche de oro a los más de 110 de años que lleva en activo dentro de la competición, ofreciendo a sus clientes un coche, un SUV, que se reconozca por una hazaña como esta gracias y que forme para de los RS (Rally Sport) de la gama, comprendida por el Octavia RS, Octavia Combi RS aunque en estos modelos dispone de un motor TSI de 2.0 litros y 245 CV.

Su diseño no pasa desapercibido, y enseguida te das cuenta de que esta versión RS es diferente, gracias al empaque deportivo que ofrece gracias a elementos como el paragolpes delantero, los faros full LED, las llantas de 20” calzadas con unos neumáticos en medida 235/45/20, así como por la doble salida de escape de forma trapezoidal encastrada en el difusor trasero, y por los acabados en color negro brillante de la parrilla delantera, los retrovisores o los marcos de las ventanillas.

En lo que a medidas se refiere, son exactamente a las de un Kodiaq convencional, que cuenta con una longitud de 4,69 metros, una anchura de 1,82 metros y una altura de 1,68 metros además de una distancia entre ejes de unos generosos 2.79 metros, lo que se traduce en un espacio interior en el que fácil es acomodar hasta 7 plazas, que podrán disfrutar de un maletero de 230 litros (en el caso de las 7 plazas) y de 715 litros en la variante de 5 plazas.

El habitáculo rezuma un ambiente premium a la vez que deportivo, en el que destacan claramente los asientos semi-backets con los reposacabezas integrados que lucen el logo RS y están tapizados en Alcántara con un pespunte de las costuras en contraste en color rojo, igual que en volante o el selector del cambio DSG. En el salpicadero encontramos unos paneles con efecto carbono, del que podrían haber cubierto también la zona del climatizador o la consola central, a la vez que el techo forrado en negro o unos pedales de aluminio que ensalzan más si cabe el aspecto deportivo de este habitáculo.

Tras el volante de corte deportivo, forrado en cuero y con las costuras en color rojo, encontramos las levas para el manejo del cambio de forma secuencial, así como el cuadro de mandos completamente digital Virtual Cockpit que para esta versión además cuenta con una información y grafías específicas, recordando en algún momento al Audi Virtual Cockpit en las versiones S y RS.

En la consola central encontramos una pantalla táctil de 8”, que forma parte del sistema de navegación AMUNSEN, desde la que se maneja todo el sistema de infoentretenimiento, siendo compatible su conectividad con Apple CarPlay y Android Auto.

Los asientos traseros del KODIAQ también ofrecen un corte deportivo, además de ser muy versátiles, ya que pueden plegarse en la proporción 60:40 y moverse 18 cm longitudinalmente lo que permite ganar espacio en el maletero, gracias también al hecho de que los respaldos se ajustan de forma individual. La tercera fila de asientos es opcional, siendo el acceso un poco complicado para un adulto, pero no para un niño, sin duda este espacio está creado para ellos.

El precio de salida del Škoda Kodiaq RS es de 44.300€ con un amplio equipamiento de serie, y de 52.700€ para la versión que ocupa nuestra prueba que añade extras como el climatizador de 3 zonas, sistema Keyless Access Full con alarma, dispositivo de remolque, Sound System CANTON, sistema de navegación COLUMBUS, asientos delanteros térmicos, Park Assist, Lane Assist o el Travel Assist entre muchos otros. Del equipamiento de serie cabe destacar, el paquete RS Lanzamiento que incluye el portón del maletero con cierre y apertura eléctrica, Navegador AMUNSEN con pantalla de 8”, telefonía confort, Infotaiment Online o el sistema Kessy Full.

Bajo el enorme capó del Kodiaq RS se esconde el archiconocido motor de cuatro cilindros y 2.0 litros diésel turboalimentado, que en esta ocasión se está configurado para llegar hasta los 240 CV y 500 Nm de par motor. Su perfecta alianza con el cambio DSG de 7 velocidades y el sistema de tracción integral de Škoda, permiten que este SUV sea muy enérgico a la par que dinámico. Este sistema está constantemente calculando la distribución ideal de par entre las cuatro ruedas, para en casos extremos poder enviar hasta un 85 % del par disponible a una sola rueda, primando la tracción a las ruedas delanteras si las condiciones de conducción son óptimas y mientras la demanda de aceleración sea baja. El mecanismo que acopla el eje delantero con el trasero es un embrague multidisco controlado electrónicamente.

El sonido del escape de Kodiaq RS es totalmente embriagador para un coche con motor diésel, siendo su sonido más parecido al de un motor mucho más potente y se consigue a través del sistema «Dynamic Sound Boost» que incluye un altavoz encapsulado en la parte derecha del parachoques posterior (junto a una salida de escape falsa) que se encarga de emitir ondas acústicas de mayor o menor volumen en función del programa de conducción seleccionado para agudizar más el sonido en función del modo de conducción seleccionado.

Sus 1.880 kg no parecen un impedimento a la hora de acelerar, y prueba de ello es la aceleración de 0 a 100 km/h de tan solo 6,9 segundos, cifra a tener en cuenta para un SUV de este tamaño, peso, pero sobre todo por el hecho de que su propulsor es diésel. Por su parte la velocidad máxima encuentra su tope en unos generosos 221 km/h.

El generoso equipo de frenos está compuesto por unos discos de acero ventilados de 340 mm para el tren delantero y de 310 mm para el trasero, siendo más que suficientes para detener a este SUV deportivo en las frenadas más acusadas o repetidas, como bien pueden ser las de un puerto de montaña.

Para sacar el mejor partido a mecánica y dinámica, el Kodiaq RS dispone de un selector de modos de conducción que nos permite escoger entre 5 predefinidos (Sport, Eco, Normal, Confort y Snow), ajustando en cada caso la respuesta del motor, el tarado de las suspensiones del Dynamic Chassis Control (DCC) que viene de serie, a la vez que se endurece también la dirección.

En autopista hace gala de ser un viajero, con el que devorar kilómetro tras kilómetro se convierte en una maniobra del todo placentera, gracias al alto grado de confort que ofrece a cada uno de sus ocupantes, que, gracias a un aislamiento acústico sin parangón, quedarán aislados del exterior. Las autovías y las carreteras son también parte de su hábitat natural, y las carreteras de montaña son su especialidad, y como si de un escalador se tratara se mueve con muchísima soltura en la transición entre curvas, gracias claro está a una puesta apunto del chasis específica y a elementos como el DCC o el sistema de tracción integral, que garantizan en cualquier situación un agarre optimo para saborear cada uno de los 245 CV.

En resumidas cuentas, el Škoda Kodiaq RS nos ha parecido como cada uno de los coches de esta marca que probamos, excepcional, no solo por su empaque deportivo, por su comodidad, equipamiento o las soluciones Simply Clever, sino por el hecho de que es un SUV premium a la altura de sus más directos rivales, entre los que encontramos el Volkswagen Tiguan AllSpace Sport o el SEAT Tarraco, aunque ninguno de los dos puede ofrecer la potencia del Škoda, pues su gama de motores acaba en los 190CV.

Algo está cambiando en Škoda, y es que han sabido adaptarse al exigente mercado de los SUV, en lo que tanta competencia hay, y sin duda con el Kodiaq llegarán a muchos más clientes potenciales, a los que sin duda esta versión RS les parecerá una de las mejores opciones, como a nosotros nos lo ha parecido también.

Escrito por, Miguel Angel Solá

Agradecimientos

  • Škoda España

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