Compartir

En Volkswagen son expertos en sacarle rendimiento a cada uno de sus modelos, bien sea con diferentes variantes o con versiones especiales como la que hoy ocupa nuestras líneas. Os hablamos del Volkswagen Golf GTI TCR, siglas que hacen alusión a Touring Car Racing, un campeonato internacional en el que la marca participa con un Golf desde el año 2015.

Quizás, y en espera de que en breve llegue la octava generación del Golf, sea esta la versión de despedida, pues del TCR tan solo se han repartido 290 unidades en nuestro país, curiosamente el mismo número que CV tiene.

La estética del Golf TCR nada tiene que ver con su hermano el de competición, que parece haberse tomado todos los esteroides del mundo. En la versión de calle, son pocos los detalles que lo diferencian de un Golf GTI convencional, así que a parte de las siglas que encontramos en la taloneras de las puertas, el labio inferior del paragolpes delantero o la moldura que hace de difusor en la parte trasera, pocas cosas más encontramos. En el interior pasa lo mismo, y a parte de la tapicería que es exclusiva para esta versión que incorpora un bordado GTI en los asientos no encontramos ningún detalle más que nos de habida cuenta de que estamos ante una versión de edición limitada.

Las llantas de serie de este Golf de 18” denominadas Belvedere montan unos neumáticos en medida 225/40/18, aunque opcionalemente se puede montar las llantas de 19” Reifnitz en color negro mate. En lo que a equipamiento de serie se refiere, el Golf TCR aporta elementos como el control de velocidad adaptativo, Light Assist, Front Assist, control de tracción con el diferencial XDS, faros LED, regulación adaptativa del tren de rodaje DCC, selector de modos de comnducción, tren de rodaje deportivo, grafías TCR, sistema de navegación Discover Media con pantalla de 8”, App Connect o el Active Info Display digital y totalmente personalizavle con diferentes vistas que puede cambiar el conductor a su antojo.

Bajo el capó delantero encontramos al corazón que anima a este deportista de élite. El ya conocido motor 2.0 TSI de 4 cilindros que aumenta su potencia en 45 CV con respecto a un Golf GTI, para rendir así unos generosos 290 CV y un par motor de 380 Nm disponibles entre las 1.950 y las 5.300 rpm. En la actualidad es el Golf más potente de tracción delantera, siendo además el sucesor del GTI Clubsport que ofrecía la misma potencia y el GTI Clubsport S de 310 CV. Para garantizar una óptima refrigeración de este motor, en la parte frontal tras la parrilla delantera se han instalado dos radiadores adicionales heredados del Golf R.

Este aumento de potencia se ha conseguido al retocar la línea de escape así como la electrónica, y no consigue más potencia tras la entrada de la normativa WLTP, motivo por el cual perdió el sistema de inyección mixta-indirecta para contar solo con el de inyección directa. De no ser así y siendo una versión tan especial, quizás hubieran superado los 310 CV del Clubsport S. Tras la parrilla delantera encontramos dos radiadores heredados del Golf R que mejoran sustancialmente la refrigeración del motor.

El propulsor está asociado a una caja de cambios DSG de 7 velocidades, puesto a punto de forma específica para esta versión. Además disponeos de elementos como el diferencial autoblocante mecánico controlado electroicamente que ha heredado del GTI Perfomance, elemento que sin duda ayuda mucho a controlar el tren delantero cuando hacemos uso de todo su potencial.

El sonido es una de las cosas que en estos coches, y a los que nos gustan los “R”, echamos de menos, y aunque este motor no suena nada mal, estamos seguros de que uno de los opcionales que nosotros le montaríamos, serían los escapes Akrapovic.

Sus prestaciones, son acordes a lo que esperas en un hatchback deportivo, siendo además el Golf GTI más rápido de la gama, gracias a una aceleración de 0 a 100 en tan solo 5,6 segundos y de su velocidad máxima limitada a unos muy generosos 250 km/h.

En lo que a consumos se refiere, lo bueno de Volkswagen, es que en todos sus coches, es posible alcanzar cifras cercanas a las de homologación. En este caso, la marca presenta unos 6,7 litros a los 100 km, cifra a la que en un viaje por autopista a 120 km/h, con el modo ECO activado te puedes acercar fácilmente. Ahora bien, si por el contrario, decides disfrutar en una carretera de montaña para saborear su talante deportivo, esa cifra puede duplicarse con mucha facilidad.

Uno de los elementos claves para poder disfrutar de este Golf en cualquier circunstancia es el Drive Mode Selection con DCC (de serie) que regula el tren deportivo de forma adaptativa en función del modo de conducción que activemos, en este caso disponemos de 5 (Eco, Comfort, Normal, Sport e Individual). Con el modo confort activado a velocidad de crucero, el motor gira entorno a las 2.000 rpm, además dispone del modo vela, lo que ayuda gratamente como hemos comentado antes a reducir el consumo. Los modos Comfort y Normal ofrecen un alto grado de confort, ya que el tarado de la suspensión no llega a incomodar. Ahora bien, si quieres disfrutar de las siglas TCR, es entonces cuando tienes que jugar con el modo Sport, para sacar a relucir todo lo que este coche es capaz de dar cuando decides pasar de ser un simple conductor a un piloto.

Ponerte a los mandos de un Golf GTI ya es toda una experiencia que podríamos tildar de equilibrada pues en cada una de las verisones que hemos probado, nos hemos encontrado con eso, con un equilibrio entre el confort y la deportividad. El TCR es un coche muy fácil de llevar, pero con carácter, así que si decides buscarle las cosquillas te encontrarás con un motor y un chasis que responden de forma instantánea a la demanda que hagas a través del pedal del acelerador.

Su hábitat natural con las carreteras de montaña, donde gracias a la suspensión adaptativa DCC y a un conjunto que te deja hacer diabluras sin apenas penalizarte, salvo que vayas muy pasado, puedes ir muy rápido, disfrutando de una transición entre curvas con una garantía de aplomo, que asusta, por que la verdad es que vas muy rápido entrelazando curvas sin que el morro en ningún momento tienda a irse hacia el exterior. Todo en este coche está pensado para ofrecer una experiencia de conducción al más puro estilo de un circuito, de ahí que sus siglas TCR estén siempre presentes.

Su precio de 43.485 euros sitúa al Volkswagen Golf GTI TCR en la cresta del segmento de los hatchbacks deportivos, donde podemos encontrar al SEAT Leon CUPRA R, BMW M 140i o al Hyundai i30N, modelos que también han pasado ya por nuestra redacción. La ecuación pasa porque está situado en precio 5.000€ por encima de un Golf GTI Performance y 1.000€ por debajo de un Golf R, así que si eres de esos entusiastas de la marca lo tendrás complicado para poder tomar una decisión racional.

Escrito por, Miguel Angel Solá

Agradecimientos

  • Volkswagen España
  • Bodegas Juve Camps
  • Fotografías: Cristóbal Arjona