Volkswagen ID.3 Pro S. Más y mejor

El Volkswagen ID.3 irrumpió en el año 2020 como el modelo que podría ser otro de los unicornios de la marca, como en su época lo fueron el Golf, Passat, Polo o T-Roc, pero por desgracia no ha sido así, ya que las ventas de coches eléctricos no ha acompasado a la nueva familia ID de la que este coche ha sido el precursor.

A finales del año pasado se presentó la actualización y la marca ha llevado a cabo un face lift del pequeño miembro ID, dotándolo además con un nuevo motor que luce una potencia de 204CV y una batería de 77 kW de capacidad con la que se estima una autonomía de hasta 562 kilómetros.

En el exterior es dónde menos cambios encontramos, y destaca la tira LED del frontal que une a las ópticas delanteras, denominadas IQ.LIGHT, que por la noche dejan una preciosa estampa del frontal del coche, dando sensación incluso de más anchura de la que realmente tiene. En la parte baja del paragolpes encontramos unas lamas que se abren de forma automática y en los laterales se ha incorporado unas entradas de aire verticales, lo que en conjunto sirve para primar la eficiencia, mejorando además el coeficiente aerodinámico que pasa de un Cx de 0,27 a un 0,26.

En el lateral, encontramos un nuevo diseño para las llantas que ahora se estrenan en medidas de 20”, con un diseño muy aerodinámico y muy a la moda en dos colores, igual que el resto del coche, que se presenta con el techo y el portón trasero en color negro, en contraste con el color de la carrocería.

Los asientos también son de nuevo diseño, y de la misma forma que en las furgos de la casa, ofrecen unos apoyabrazos individuales, además de estrenar también nuevos colores y materiales para la tapicería como son el caso de los asientos deportivos de nuestra unidad de pruebas tapizados en piel y alcántara que sujetan el cuerpo a la perfección, disponen de ajuste eléctrico y son calefactados.

El habitáculo sigue siendo igual de minimalista que la generación anterior, y el único cambio a mayores es la pantalla de infoentretenimiento que ahora se ofrece en 12”, 2” más que la anterior, estando ligeramente orientada hacia el conductor y con compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica que estrena además el nuevo software 3,5 de Volkswagen mejorando la navegación y la rapidez de acceso a todas las funciones. El nuevo planificador de rutas del sistema de navegación es todo un acierto en un coche de estas características, sobre todo a la hora de planificar un viaje largo, dónde tendrá en cuenta la batería que tienes en ese momento, así como los puntos de recarga que podrás encontrar hasta tu destino.

Por su parte el volante mantiene los mandos ápticos que no nos acaban de convencer así como tras este encontramos el cuadro de mandos de 5,3” con la información justa y necesaria para la conducción. Aquí y de forma muy integrada en el lateral superior derecho encontramos el mando que gestiona el selector de marchas, que mantiene la opción B con la que se activa el sistema de frenada regenerativa.

También encontramos mejoras en la calidad de acabados de las puertas y los paneles inferiores del salpicadero, donde anteriormente se hacía un uso masivo del plástico, ahora se siente como más premium.

En la parte trasera encontramos espacio para dos ocupantes, que disfrutarán de su asiento individual, mientras que el maletero ofrece 385 litros de capacidad, fácilmente ampliables hasta los 1.267 litros si abatimos los respaldos de los asientos traseros.

El ID.3 está disponible en 6 versiones diferentes que os pasamos a detallar en este cuadro a modo de resumen.

Básicamente lo que cambia entre las versiones es a parte de la potencia y la autonomía el equipamiento, a excepción del GTX que ofrece ya una potencia más elevada y un equipamiento que ensalza la deportividad del ID.3.

Nuestra unidad equivale a la versión PRO S, cuyo precio de partida son 40.545€ a los que si le sumamos el equipamiento opcional Verde Olivo Metalizado (1.005€), paquete interior Plus con asientos deportivos (4.590€), Paquete Confort (1.495€) o el Paquete de asistentes (1.350€), incrementamos la factura hasta los 48.985€ sin ayudas ni descuentos de marca.

El ID.3 Pro S cuenta con un motor trasero que rinde una potencia de 150 kWh (204CV) y un par motor de 310 Nm, lo que le permite hacer el 0 a 100 km/h en 7,9 segundos y lanzarse hasta los 160 km/h, velocidad que por cierto, tiene limitada.

Este coche está pensado dicen para uso urbano, pero aquí discrepamos, ya que ofrece autonomía suficiente para viajar, ya que los 559 kilómetros que la marca anuncia en esta versión con la batería de 77 kWh, bien pueden convertirse, según por donde conduzcas en unos muy generosos 470 kilómetros como fue nuestro caso, durante nuestra prueba, teniendo en cuenta que no tocamos para nada la ciudad y todos los kilómetros los hicimos por autovía, autopista y carreteras secundarias. Esta batería, admite cargas de hasta 170 kW en corriente continúa lo que mejora el tiempo de carga del 20 hasta el 80% de tan solo 20 minutos, y hasta 11 kW en corriente alterna, como podría ser el enchufe de nuestra casa o un wallbox.

El selector de modos de conducción nos ofrece cuatro opciones (Eco, Comfort, Sport e Individual), siendo la Eco la que más marca la diferencia con el resto por el hecho de “restringir” el uso por ejemplo del aire acondicionado. En el modo Sport, el tacto del acelerador se vuelve más directo, y quizás sería un acierto equiparlo con el DCC por aquello de tener un esquema de suspensiones algo más duro, sobre todo en este modo de conducción activado para primar así un poco más la conducción deportiva.

Se mueve con mucha soltura, y su centro de gravedad gracias a la perfecta colocación de la batería y el motor en posición trasera, hacen que la dinámica sea bastante noble en cuanto a reacciones más todavía, teniendo en cuenta que lastra casi dos toneladas de peso.

En lo que a consumos se refiere, puedes ver cifras conduciendo a velocidades de crucero de entre 100 y 120 km/h en autovía o autopista de entre 17 a 20 kWh, consumo que evidente puede mejorar o empeorar en función de todo lo que lleves activado, como bien podría ser el caso del aire acondicionado. Nos ha parecido muy aceptable, por cierto.

CONCLUSIÓN

Sinceramente creo que esta nueva generación aun tratándose de un simple restyling, ha mejorado mucho sobre todo en percepción de calidad a su versión anterior, dejando ahora un habitáculo muy próximo al del CUPRA Born, lástima que no lo haga también en el diseño pues este último tiene en el exterior connotaciones más deportivas.

El aumento de la batería hasta los 77 kWh es sin duda la gran baza de este coche, llamado a competir, no solo con su primo Born, sino también con modelos como el BYD Dolphin 3, MG4 Electric o el Kia e-Niro entre otros.

Escrito por, Miguel Angel Solá

AGRADECIMIENTOS

Volkswagen España

Fotografías: @cristobalarjonafoto

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