La pasada semana acudimos a una cita que desde hace 5 años no se repetía, la celebración del Salón de Ginebra como coloquialmente se le conoce. Este año, se ha visto vislumbrado por la falta de marcas que han querido ir a esta cita, lo que evidencia más si cabe la decadencia de los salones. Es evidente que es justificable, ya que por un lado el aspecto económico influye, y mucho y por otro, hay marcas que prefieren otro tipo de eventos para presentar a sus novedades.
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Así que atrás queda nuestro recuerdo de ver allí a fabricantes como Koenigsegg, Bugatti, Lamborghini, Ferrari, Aston Martin, Rímac y muchos otros preparadores y carroceros que exponían extremas y carísimas bellezas para el deleite de todos, así como por marcas como BMW, Audi o Mercedes que aquí lanzaban sus novedades o nos dejaban ver a modo de concepts el futuro de sus modelos.
En esta ocasión, tan solo han sido ocho los fabricantes que se han dado cita aquí, entre ellos BYD, MG, Lucid, Renault, Dacia o Microlino entre otros.
BYD ha sido otro de los fabricantes que no ha querido perderse la cita helvética, por varias razones, y la principal ha sido para presentar el BYD Seal U híbrido enchufable que presume de una autonomía de hasta 70 kilómetros. Por otra parte, hemos visto también el restyling del Tang, modelo ya consolidado en la marca, así como el imponente SUV o 4×4 de Yangwang, el U8, dotado de 4 motores eléctricos y una descomunal potencia de 1.000CV. Por último, han presentado también para Europa su marca de lujo Denza con una apuesta muy atractiva con el monovolumen D9.
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Renault ha sido el máximo exponente del Salón, ya que no ha querido desperdiciar la ocasión de presentar en primicia al Renault 5 E-Tech, su compacto 100% eléctrico. Este modelo representa y presenta a la vez el plan estratégico de la marca para el futuro inmediato de su electrificación, en el que se utilizará la plataforma denominada AmpR Small para los vehículos que pertenecen al segmento B. A parte de este modelo también pudimos ver expuestos los nuevos Megane, Scenic y el Rafale, en versiones híbridas enchufables y eléctricas también.
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Pequeños fabricantes como Microlino también han estado aquí, con un coche divertido e icónico que nos recuerda al Iseta, pero 100% eléctrico con una talla de 2,5 metros de largo y una anchura de 1,5 metros que dispone una autonomía de hasta 177 kilómetros y que es capaz de lanzarse hasta los 90 km/h.
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Ahora bien, si ha habido un coche que ha marcado el Salón, ha sido sin duda el Kimera Evo38, basado en el mítico coche de rallies, Lancia 037 dotado, atentos, de un motor de 4 cilindros turbo capaz de desarrollar nada más y nada menos que 608 CV de potencia y con tracción integral.
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Una de las cosas que para nosotros ha salvado el Salón, ha sido que lo han divido en zonas temáticas y en una de ellas, pudimos ver una serie de hiper deportivos procedentes de una colección privada, entre los que encontramos; Aston Martin Valkyrie, Bugatti Chiron Sport, McLaren Elva, Ferrari La Ferrary y F40, Porsche 959, McLaren Senna o una impresionante unidad del Pagani Huayra entre otros. Otros deportivos algo más clásicos, como el Lamborghini Countach, el Mercedes SL Alas de Gaviota, el Aston Martin DB 4 o el Maserati 3500 GT han sido otra de las bellezas que hemos podido contemplar.
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Es una lástima que este Salón, que antes de la pandemia era un referente entre los fabricantes y amantes del mundo del automóvil tenga fecha de caducidad. Quizás el hecho de que bianualmente lo hagan en Qatar, no le quite el sentido a lo que antes era, pero nosotros creemos firmemente, que, en Ginebra, tiene los días contados.
