Normalmente, cuando sabemos que vamos a probar un coche, tenemos siempre muchas expectativas, sobre todo cuando sabemos que es uno nuevo, recién salido del horno, por así decirlo, y más todavía cuando es un CUPRA. Pues bien, en el caso del CUPRA Formentor, tenemos que decir que las expectativas han superado lo que esperábamos.
Hace unos meses, hablábamos con Jordi Gené, quien ha participado activamente en el desarrollo del Formentor. Recuerdo que, en una buena conversación, elogiamos al CUPRA Ateca, y el textualmente nos dijo “cuando probéis el Formentor ya me diréis que os ha parecido, porque si el Ateca os ha gustado, con este disfrutareis mucho”. Y que razón tenía, pues hacía tiempo que queríamos ponerlo a prueba para ver si todo lo que nos había contado era o no cierto, que sabíamos que lo sería, sino más bien contrastable, y así ha sido.
CUPRA, está dando pasos agigantados para desmarcarse de la que fuera su marca madre SEAT, y lo está consiguiendo. De hecho, cada año, en su aniversario han querido cumplir con una promesa, y este año, nada más y nada menos han lanzado al CUPRA Formentor VZ5, el máximo exponente en lo que a motorizaciones dentro de la gama se refiere, dotado de un motor de cinco cilindros y con una potencia de 390CV.
El Formentor es el primero de los CUPRA creado desde un folio en blanco, ya que no tiene homólogo en SEAT y viendo los resultados en lo que a ventas se refiere ha sido todo un acierto. De ahí, además que no solo sea un SUV de corte y talante deportivo, sino que también se ofrece en una versión de acceso 1.5 TSI gasolina de 150CV con cambio manual desde 29.670€ o con cambio DSG desde 31.870€. Por encima encontramos dos versiones híbridas enchufables, la 1.4 e-Hybrid de 204CV y la 1.4e-Hybrid de 245CV, disponibles desde los 36.640€ para la primera y 43.350€ para la segunda.
Por encima, la versión que hoy ocupa nuestras líneas y de la que ahora os hablaremos con más detalle, la del Formentor VZ 2.0 TSI de 310CV con cambio DSG de 7 velocidades que podemos encontrar desde los 44.920€ sin opciones. Si a esta versión le sumamos elementos como los de nuestra unidad de pruebas, entre los que cabe destacar los frenos Brembo, el techo panorámico, el sistema de sonido BEATS o el Safety Cool Pack VZ, incrementamos la factura hasta los 51.990€, precio que a nuestro entender no es caro, teniendo en cuenta en conjunto lo que este SUV deportivo es capaz de ofrecer.
Plataforma compartida, diseño evocador
El CUPRA Formentor comparte plataforma con el nuevo SEAT León, la MQB-EVO del grupo Volkswagen, lo que le lleva a ser un SUV, pero con rasgos de compacto deportivo, ya que sus medidas así lo pretenden. Con unas cotas de 4,45 metros de largo 1,84 de ancho y 1,51 de alto, queda a caballo entre el León y el ATECA.
Su diseño no pasa desapercibido, ya que sus formas angulosa lo dotan allá por donde lo mires de musculatura para pronunciar todos aquellos elementos que ensalzan su deportividad. Una de las cosas que nos encanta del Formentor, es que todas sus versiones, son casi idénticas. En el frontal destaca la parrilla que engasta al logo de CUPRA de grandes dimensiones, así como los faros dotados de tecnología LED y un paragolpes con dos generosas entradas de aire laterales, así como un faldón que incluye un pequeño splitter. Quizás lo único que vemos en esta zona del coche, que no nos acaba de convencer son los faros antiniebla redondos, que no casan en absoluto con las formas ángulos del Formentor.
Todo el conjunto delantero hace que la sensación del coche es que se más ancho de lo que verdaderamente es, ya que todo contribuye a ello, como el capó o los nervios que recorren desde los faros la línea ascendente hasta el pilar A.
En la vista lateral, destacan como no las preciosas llantas de 19”, calzadas con unos neumáticos en medida 245/40/19 para ambos ejes, que dejan entrever los discos de frenos, así como las pinzas firmadas por Brembo para esta ocasión. Ahora bien, si hay algo que destaca, es la caída del techo en el ¾ trasero, dándole ese estilo de SUV coupé, lo que unido al alerón del techo es quizás la parte del coche que más nos ha gustado.
La zaga, dispone de una firma lumínica impresionantemente bonita, sobre todo por la noche, donde vemos una tira LED que recorre toda la trasera uniendo ambos pilotos. En la parte más baja, encontramos un difusor que da cabida a las dobles salidas de los escapes delatando así, su potencial.
Un interior reconocible pero premium
El habitáculo es un espacio curioso, donde se percibe lo que la marca ha querido denotar, un ambiente premium, y lo ha conseguido. Encontramos la misma distribución que en el nuevo SEAT León, pero con unos materiales que enfatizan más si cabe ese grado de excelencia. El volante, es precioso, y recuerda quizás por su disposición de la botonería al del Audi R8, aunque aquí los detalles en cobre nos hacen recodar el sello de identidad propio de la marca. La parte superior del salpicadero está acabada en un material símil a la piel, lo que unido a unas costuras simuladas le dan una sensación muy agradable.
Tras el volante encontramos el cuadro de mandos, representado en una pantalla de 10,25” totalmente personalizable en lo que a vistas e información mostrada se refiere, y muy similar a la de los modelos RS de Audi, sobre todo en la vista más deportiva, en la que el cuenta vueltas toma gran protagonismo.
El salto tecnológico lo encontramos con la pantalla de 12” táctil que ya hemos podido probar en el nuevo SEAT León, que aglutina básicamente el funcionamiento del sistema de infoentretenimiento, así como diversos parámetros de configuración del Formentor o el sistema de climatización, entre otras muchas funciones. Concentrarlo todo tiene una ventaja, y es que el resto del salpicadero queda libre de muchos botones, que, en el caso del Formentor, encontramos solamente al lado izquierdo del volante para el sistema de iluminación exterior. Pero, por otro lado, tiene la desventaja, de que tienes que aprenderte de memoria donde está cada una de las funciones del coche, lo que lleva su tiempo. Una de las cosas que no nos ha convencido, y que vemos no tiene sentido, es poner bajo esta pantalla los mandos del volumen y los termostatos del sistema de climatización, como acceso directo, sobre todo, porque no están retroiluminados, lo que hace que, por la noche, sea difícil encontrarlos.
El sistema multimedia cuenta con conectividad sin cable, con Android Auto, Apple CarPlay y MirrorLink, lo que supone una conectividad del 100% con cualquier smartphone de última generación.
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En la consola central encontramos el “pequeño” selector del cambio denominado by-wire del grupo, siendo más que suficiente para cumplir con su función, además del botón con el que podemos desconectar de forma rápida el control de tracción, así como el hueco para cargar el móvil dotado de dos tomas tipo USB C. Este selector, deja pues que para manejar el cambio de forma secuencia, tengamos que recurrir a las levas que encontramos tras el volante deportivo.
Hay que destacar como no el sistema de iluminación ambiental, que dispone en la parte frontal por debajo del parabrisas de una tira lumínica que a parte de cambiar de color se ilumina cuando tenemos un vehículo en la posición de ángulo muerto o al abrir la puerta si se acerca alguien por los flancos.
Ahora bien, si hay algo que destaca en el Formentor son sus asientos tipo backet, que sujetan al cuerpo a la perfección en cualquier tipo de apoyo, además de ser muy cómodos, dejando además una posición de conducción más deportiva que la de su hermano el CUPRA Ateca.
Las plazas traseras son amplias y pueden dar cabida a tres ocupantes, aunque la central como en todos los compactos no disfrutará de la misma comodidad que las laterales. El maletero por su parte, en esta versión ofrece 420 litros al tener tracción integral, resta 30 litros frente a los 450 litros de las versiones con tracción delantera y puede ampliar su capacidad hasta los 1.475 litros si abatimos los respaldos de los asientos traseros.
Un SUV que se disfruta en cualquier situación
El corazón que anima al CUPRA Formentor es el archi conocido motor 2.0 TSI del Grupo que ofrece 310CV de potencia y un par motor de 400 Nm, unido a una caja de cambios DSG de 7 velocidades.
En la marca, para darle más sensacionalismo al sonido del motor se ha recurrido a tres niveles de intensidad, a través del sonido digital, algo que parece estar de moda y que a nosotros al menos no nos acaba de gustar, pues deja un rugido demasiado gordo a la vez que artificial. Quizás unos Akrapovic hubieran sido más que suficiente para amplificar el sonido. Aun así suena bonito, sobre todo cuando lo estiras hacia el corte de inyección o en las reducciones, aunque se hecha como no de menos los petardeos que deberían de acompañarlas. Dejando de lado el tema del sonido, este propulsor es muy enérgico y sube muy bien de vueltas gracias al cambios DSG de doble embrague que te invita en todo momento a jugar con las levas.
Sus prestaciones son acordes a su segmento. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos, mientras que es capaz de lanzarse hasta unos cómodos 250 km/h. En lo que a consumos se refiere, la marca bajo el ciclo de homologación WLTP ha conseguido homologar un consumo combinado que se mueve entre los 8,2 y los 9 litros a los 100 kilómetros. A estas cifras te puedes acercar, sobre todo en autopista o autovías a velocidades de crucero, ahora bien, si decides disfrutar del modo CUPRA, aquí podrás rondar fácilmente entre unos 11 o 12 litros.
Para modificar el comportamiento del CUPRA Formentor y sentir el ADN de la marca, encontramos un selector de modos de conducción que nos permite escoger entre cinco modos que modifican diversos parámetros como la dirección, le gestión de la transmisión, la dureza de la suspensión adaptativa, el sonido o la respuesta del acelerador. Este selector lo encontramos en el volante con el propio logo de la marca, y sinceramente es muy tentador cada vez que te pones al volante, dejar por defecto el modo CUPRA.
Entrando en materia dinámica, y tras haber hablado de este coche con el piloto que ayudó a su desarrollo, teníamos muchas ganas de ponerlo a prueba, para comprobar que superaría con creces al tan amado y elogiado por nuestra parte CUPRA Ateca, del que ya os hemos hablado en tres ocasiones, y la verdad, es que el Formentor da un salto en lo que a dinámica se refiere, sobre todo, por una puesta apunto de un chasis que encontramos está más afinado, a lo que contribuye también su menor medida y peso con respecto al Ateca.
Uno de los elementos que influyen gratamente a esta dinámica de conducción tan perfecta es el Dynamic Chassis Control, que permite regular la suspensión hasta en 15 niveles, así como la dirección que se vuelve más dura y pesada gracias a sus sistema de asistencia variable.
El Formentor se mueve con una agilidad tremenda lo que se traduce en un paso por curva no solo elevado, sino que parece girar como si de un compás se tratara, con una perfección y precisión quirúrgica. Está claro que este coche merece una prueba en circuito, por lo que para cuando tengamos ocasión de probar la versión VZ5 lo tendremos muy en cuenta, y quizás hasta os sorprendamos de con quién lo probaremos.
El motor, cumple con su cometido a la vez que el cambio, lo que te permite hacer transiciones entre curva y corva con energía sin perder apenas potencial, gracias como no a sus 400 Nm de par motor y a un propulsor que parece no tener fin cuando lo estiras. Todo en este coche está pensado para garantizar una experiencia de conducción deportiva y sin duda alguna es lo que obtienes si lo quieres sacar de sus casillas, pues os aseguramos que cuesta llegar a ese extremo, ya que además de todo lo anteriormente expuesto además nos encontramos con el sistema de tracción integral 4Drive, que evita en la medida de lo posible que el Formentor se despegue del asfalto.
El sistema de frenado del CUPRA Formentor de serie está formado por unos discos delanteros de 310 mm, aunque opcionalmente y como este era el caso, se pueden montar unos de 370 mm con pinzas Brembo, que garantizan un buen mordiente incluso tras bastantes kilómetros de conducción deportiva. Su tacto es directo y muy efectivo, con un pedal duro de recorrido corto y que no desfallece aun prolongando su uso.
CUPRA Formentor en el club de los 300CV
Como ya os hemos comentado en otras pruebas, el club de los 300CV está copado por alternativas al Formentor como el BMW X2 M35i, Audi SQ2, Mercedes-AMG GLA 35 4MATIC, el propio CUPRA Ateca o el nuevo CUPRA León y otra alternativa del grupo como el T-ROC R. Dejando atrás el precio de uno o de otro, y habiendo probado todos estos coches a excepción del T-ROC R (tomen nota en Volkswagen), os aseguro que lo tendría muy difícil para sacar del primer cajón del podio al Formentor por todo lo que os hemos contado en esta prueba.
Está claro que, en nuestro garaje ideal, el Formentor se quedaría con una de las primeras cinco plazas, por cualidades no solo dinámicas sino también por las estéticas, ya que nos parece una opción diferente al resto de coches, que al final parten de otras versiones. En este caso, partió de un folio en blanco, y aunque comparte muchas cosas con el SEAT León o el CUPRA León, el Formentor sería nuestra mejor alternativa.
Escrito por, Miguel Angel Solá
Agradecimientos
- CUPRA España
- Ajuntament de Sant Martí Sarroca
- Fotografías: Cristóbal Arjona