Hoy, ya no nos queda más remedio que confesar un pecado, un hecho que es real y que nos condenará para siempre. Si ya estábamos enamorados del CUPRA Ateca, ahora lo que sentimos por esta edición limitada es pasión por este SUV de corte deportivo.
CUPRA ha sabido encauzar a este deportivo en el mercado europeo, que parece haber tenido una buena acogida en 2019 con 20.600 unidades vendidas en todo el mundo, lo que representa un 78% más que en 2018, siendo el mercado alemán el que mejor acogida ha llevado con más de 8.700 adquiridas, seguido por Reino Unido y España en tercer lugar.
La marca avanza su estrategia de implantación y pretende ir abriendo concesiones propias a lo largo y ancho del planeta, siendo una de las primeras el CUPRA Garage que el pasado mes de noviembre abrieron en México, siendo esta la primera flagship store a nivel mundial.
Solo 1.999 unidades y 350 para el mercado español
Es por ello, que para potenciar más si cabe la implantación de la marca, han creado una expectativa con el CUPRA Ateca Limited Edition, del que tan solo se han fabricado 1.999 unidades siendo la que nosotros probamos hoy una de ellas, de las 350 que verán el mercado español, y de las que tan solo 50 equiparán la línea de escapes Akrapovic.
Para la comercialización llevaron a cabo una iniciativa de reservas online, donde las primeras 20 unidades se reservaron sin que los clientes conocieran todavía el precio final y en un tiempo récord de 24 horas. Tanto fue el éxito que en pocos días se llegaron ya a reservar hasta 70 unidades.
El diseño de esta edición limitada es básicamente igual a un CUPRA Ateca convencional, aunque lo primero que delata que estamos frente a esta versión son sus exclusivas llantas de 20” calzadas con unos neumáticos en medidas 245/35/20 para ambos ejes, que solamente estarán disponibles para la ocasión, que dejan entrever unas pinzas de frenos firmadas por Brembo con unos discos de 18” en su interior. Están pintadas en un color cobre, que encontramos en otros elementos decorativos de la carrocería, como los logos.
Para el color exterior, la marca se decanta por esta tonalidad gris, denominada Gris Graphene, siendo también exclusivo para esta Limited Edition, que en combinación con el color cobre de las llantas y elementos como las carcasas de los retrovisores en carbono y el alerón del techo, le dan a todo el conjunto una imagen muy deportiva.
Habitáculo deportivo y con detalles exclusivos
Si en el exterior encontramos elementos identificativos propios y exclusivos para esta versión en el interior pasa lo mismo. Lo primero que salta a la vista tras abrir la puerta son los asientos tipo backet tapizados en alcántara bicolor, así como el logo CUPRA estampado en la zona del reposacabezas.
Los laterales de las puertas, así como los asientos traseros también están tapizados en este material conformando así un habitáculo de ambiente premium, que de haber utilizado por ejemplo fibra de carbono en las zonas donde encontramos las típicas inserciones en piano black, hubieran dado un toque más exclusivo y deportivo al salpicadero, siendo insuficientes las molduras que encontramos alrededor de la consola central y las salidas de aire.
En lo que a equipamiento se refiere esta edición limitada justifica el aumento de precio con respecto a un CUPRA Ateca convencional, que podemos encontrar desde los 45.550€, frente a los 58.00€ de esta versión, en la que cabe destacar su amplio equipamiento como el techo panorámico de cristal, equipo de audio firmado por Beats con 340 W de potencia, control de velocidad de crucero adaptativo ACC, lane assist, frenada de emergencia automática en ciudad, detector de fatiga, Digital Cockpit de 10,25” o el navegador Plus con la pantalla de 8” en la consola central, así como los elementos de carbono del exterior, las llantas de 20” o los escapes Akrapovic.
Motor y dinámica de conducción
El corazón que anima al CUPRA Ateca Limited Edition es el ya conocido motor de 4 cilindros TSI sobre alimentado de 2.0 litros, que desarrolla una potencia de 300CV y unos impresionantes 400 Nm de par motor, que le permiten lanzarse de 0 a 100 km/h en tan solo 4,9 segundos y de alcanzar los 247 km/h de velocidad punta.
Aunque lo mejor de este CUPRA no son sus prestaciones, que también, sino el comportamiento dinámico que ofrece para un SUV de estas características, siendo sin duda alguna el referente dentro de su segmento donde podríamos encontrar rivales de la talla del BMW X2 M 35i o el Audi SQ2, que, si bien su empaque puede ser más premium, su comportamiento deportivo no lo es.
El propulsor, una vez lo pones en marcha parece que va ganando brío, es mu elástico y permite estirarlo de vueltas gracias al efectivo cambio DSG de doble embrague y 7 velocidades, siendo este junto al sistema de tracción 4DRIVE los aliados perfectos para poder disfrutar de lo lindo en carreteras de montaña, el hábitat natural de este coche.
Los escapes Akrapovic no están solo ahí para lucir palmito como se suele decir, o para enfatizar más si cabe el sonido agudo del motor, sino también para reducir en hasta 7 kilos el peso de todo el conjunto (1.608 kg). En los modos de conducción Sport y CUPRA el sonido que sale por ellas te hace pensar que estas al volante, como diría nuestro amigo y piloto Marcel Besolí algo “gordo, gordo”.
Todo en este coche está pensado para ofrecer una experiencia de conducción deportiva, aunque como todo también tiene su lado civilizado, para ello tan solo deberás jugar con el selector de modos de conducción, donde además de los modos Sport y CUPRA encontramos un modo para viajar o la ciudad y dos específicos para su uso por montaña.
Para concluir esta prueba solo podemos decir lo mismo que al inicio de esta, que este coche nos ha robado el corazón como pocos lo han conseguido hacer. El CUPRA ATECA sea en la versión que sea, es uno de los referentes SUV’s deportivos de tamaño medio que ahora mismo podemos encontrar en el mercado, a un precio razonable por todo lo que ofrece y con un comportamiento y una dinámica de conducción propia de un compacto.
Escrito por, Miguel Angel Solá
Agradecimientos
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